Como cada primavera, Prímula Prim ha decidido cuidar su dieta y no tomar ni un dulce más. Algo que no resulta sencillo cuando eres la dueña de la más deliciosa pastelería de la ciudad. Por suerte, el señor Prim, que la ama tiernamente, ha preparado durante el invierno una sorprendente y revolucionaria receta. ¿Abrimos la caja?
Una historia rebosante de pasteles, hojaldres, bombones y amor, mucho amor.